Siempre se había sentido enormemente intrigada por aquel palacio… y por el príncipe que vivía en él.
Nadie podía negar que el príncipe Murat era un hombre misterioso, poderoso y muy inteligente, pero Daphne Snowden quería que su futuro esposo tuviera algo más. Quería a alguien que no sólo la viera como la mujer que le daría un heredero al trono. Alguien que la respetara. Alguien que la amara.
Y...